Visto como están hoy las pistas de Andorra, no creo que haga falta explicar mucho por qué hemos tomado la (dolorosa) decisión de cancelar la salida a Andorra prevista para el puente. En fin, son cosas que pasan, ¿no? En enero nos resarciremos, en Luz y Baqueira.
Mientras tanto, habrá que ir haciendo rogativas a la Virgen Blanca, a ver si nieva.